Tras más de un año desde que inició la pandemia, los aficionados finalmente han podido regresar a las gradas para los partidos de béisbol de los Red Sox, disfrutar del hockey con los Bruins y emocionarse al ver a los Celtics en el baloncesto.
La demanda supera por mucho la oferta, que está limitada por medidas de seguridad, lo que dispara los precios de los boletos a niveles récord. Actualmente la capacidad en los estadios Fenway Park y TD Garden es de un 25%.
En promedio, los precios de reventa de los Red Sox, Bruins y Celtics están entre los $350 esta temporada, alrededor de $200 más que antes de la pandemia, según TicketIQ, una firma que monitorea los precios.
Según datos presentados por WBUR, una entrada para los Red Sox en 2019 tenía un precio de $155, mientras que ahora son $345; es decir, casi un 223% más. Por su parte, los boletos de los Bruins aumentaron en un 244% de $151 para el año 2019 a $369 en la actualidad. Y los Celtics pasaron de $154 por entrada en 2019 a $356 en el presente año, un 231% más.
Conseguir boletos por valor nominal puede ser una tarea difícil, ya que los equipos ofrecieron primero a sus abonados (ticketholders en inglés) muchos de los asientos que después pasaron a estar disponibles para el resto del público a fines de marzo, cuando los funcionarios estatales establecieron el límite de asistencia en el 12%.
Si bien es posible actualmente conseguir entradas en la taquilla, los boletos en los mercados de reventa como StubHub y SeatGeek son a veces la única opción.