La Unión Europea anunció este lunes una hoja de ruta para permitir que personas vacunadas de fuera del bloque viajen a Europa, presagiando un continente más normal y conectado después de más de un año en el que sus bulevares y belleza han estado fuera del alcance de la mayor parte del mundo.
La propuesta, que podría estar en vigor a finales de junio, dará esperanza a los viajeros de Estados Unidos y otros países con agresivos programas de vacunación contra el coronavirus que están ansiosos por visitar algunos de los destinos más populares del mundo.
Estados Unidos ha estado trabajando durante meses para establecer un sistema interno para aliviar las restricciones de viaje dentro del club de 27 naciones y otros que participan en su zona de viaje libre de fronteras. El anuncio del lunes tenía la intención de mostrar cómo ese sistema podría adaptarse para otros países.
Europa otorgaría a las personas completamente vacunadas y a sus hijos la oportunidad de visitar, independientemente de los niveles de brote de coronavirus en sus países. Se permitiría la visita a ciudadanos no vacunados de países no europeos a medida que la situación sanitaria mejore en sus países.
“Proponemos permitir la entrada a la UE por razones no esenciales», dijo el portavoz de la Comisión Europea Adalbert Jahnz, «para todas las personas que han recibido la última dosis recomendada de una vacuna autorizada por la UE».
Freno a las variantes
Al mismo tiempo, el bloque crearía un mecanismo para detener los viajes rápidamente desde países con nuevas variantes preocupantes del coronavirus, de hecho configurando un sistema que es mucho más abierto que ahora, pero que también podría cerrarse si es necesario.
Algunos países europeos, incluidos Grecia e Islandia, ya han dado luz verde a los viajeros estadounidenses. Pero la gran mayoría permanece cerrada a viajes no esenciales.
Dado que el sistema europeo de viajes sin fronteras dentro de sus límites depende de la cooperación entre los países, tienen incentivos para encontrar una forma de trabajar juntos.
La propuesta aún está sujeta a cambios y, en última instancia, necesitará la aprobación de los estados miembros de la UE, además de la Comisión Europea.
The Washington Post. Traducción libre por El Tiempo Latino
