Este jueves la Coalición de Massachusetts para la Seguridad y Salud Ocupacional (MassCOSH) publicó un informe especial en el que documenta las bajas laborales que ha dejado en todo Massachusetts la pandemia de coronavirus.
Titulado “Morir por el trabajo: Documentando la mortífera carga de la pandemia sobre los trabajadores de Massachusetts”, el oficio detalla cuántos residentes, en edad de trabajar, han muerto a causa del COVID-19, además enumera a los empleados que fallecieron a causa del patógeno, después de una posible exposición en su lugar de trabajo. De igual forma incluye los cálculos de los expertos en salud ocupacional sobre cuántos empleados han dado positivo y el número récord de quejas de seguridad hechas por los trabajadores.
El informe asegura que unos 59 empleados murieron por COVID-19 luego de haber sido expuestos al virus en su lugar de trabajo. La MassCOSH enfatiza que el número de decesos creció debido a que los empleadores y las agencias gubernamentales no hicieron un seguimiento adecuado de los datos de COVID-19 en el lugar de trabajo. El informe cuenta más de 1.000 residentes en edad de trabajar que fallecieron a causa del virus entre el 10 de marzo y el 31 de julio.
El 28 de abril de 2019, “la MassCOSH informó de un total de 69 trabajadores que murieron en el trabajo en 2018 debido a lesiones y enfermedades”.
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El pasado 10 de abril, una semana antes de que el estado alcanzara su pico más alto en los casos, la OSHA decidió relajar la normativa de registrar los casos de COVID-19 relacionados con el trabajo para la mayoría de las empresas, lo que causó que los casos relacionados con el trabajo no fueran reportados. En Massachusetts, los funcionarios de salud sólo comenzaron a informar de esto en julio, después de que MassCOSH y el Grupo de Trabajo para la Equidad de COVID-19 de la Asociación de Salud Pública de Massachusetts presionaran a los legisladores para aprobar una ley que exigiera la recopilación de datos. Sin embargo, todavía faltan muchas cifras sobre la ocupación.
“Casi el 70% de los registros de casos positivos de COVID-19 desde el 10 de marzo hasta el 31 de julio – y el 97% de todos los registros de pruebas de COVID-19 en ese tiempo – faltan la ocupación del individuo”.
En el informe también se detallan las miles de quejas presentadas por los trabajadores, en las que denuncian condiciones peligrosas. También señalan que durante toda la pandemia, sólo un lugar de trabajo ha sido citado hasta ahora por la OSHA por violaciones de seguridad en el lugar de trabajo de COVID-19.
En el documento la MassCOSH pide que se tomen medidas drásticas para evitar que los trabajadores se enfermen y mueran a causa de este virus. “Incluyen acciones a nivel federal, como la aprobación de la Ley de «Héroes» (aprobada en la Cámara de Representantes como H.R. 6800)”, que ordena:
-OSHA promueve un Estándar Temporal de Emergencia para proteger a los trabajadores de enfermedades infecciosas transmitidas por el aire.
-Ampliar la Ley de Producción de Defensa para aumentar los suministros de EPP en los puestos de trabajos.
-Ampliación del seguro de desempleo, ampliación de las licencias obligatorias por enfermedad y por motivos familiares, y otras protecciones.
