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Trump: Líder de políticas que afectan a los centroamericanos

La falta de oportunidades educativas y económicas que se viven en países de Centroamérica y de América del Sur, ha generado históricamente, que ciudadanos busquen una tierra segura para vivir y para desarrollarse personal y profesionalmente.

Estados Unidos, tiene un lema que lo hace más atractivo para los inmigrantes: El sueño americano. Desde que llegó Donald Trump a la Casa Blanca, impulsar la economía y frenar la llegada ilegal, han sido dos de sus principales políticas. Sin embargo, el hecho de que el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita cada trimestre supere los 16 mil dólares, más allá de lo que dice públicamente con respecto a endurecer las políticas contra inmigrantes, impulsa su llegada.

La frontera sur con México es el lugar por donde más intentan entrar personas desesperadas por mejorar sus condiciones de vida. En el estado de Texas, uno de los destinos más inmediatos de quienes logran su cometido al pisar suelo estadounidense, la hora de trabajo equivale a al menos $11, según testimonios recogidos por este medio. Un ciudadano mexicano o de países del Triángulo del Norte, pasaría a devengar, entonces, $440 a la semana si trabaja ocho horas diarias. Al mes, el ingreso se elevaría a mil 760 dólares.


ESPERANZA. Cientos de inmigrantes han mantenido la esperanza en mejorar su condición de vida. -

Ruth Hernández- EFE

ESPERANZA. Cientos de inmigrantes han mantenido la esperanza en mejorar su condición de vida. –

“Rosita”*, una inmigrante mexicana que desde hace cuatro meses trabaja en El Paso, Texas, narra cómo ha podido sobrevivir a pesar de que no tiene el trabajo deseado. La joven logró independizarse y ayudar a sus familiares con un bajo poder económico en el país azteca. No vio futuro en su país y eso la obligó a migrar, porque aunque en México habrá un nuevo salario a partir de enero de 2020, el mismo sigue siendo insuficiente para abastecer las necesidades. Según el gobierno, los mexicanos cobrarán unos 198 dólares americanos al mes, mientras Rosita, en un nuevo país, recibe más de $440  por semana.

La mayoría de los inmigrantes ilegales que llegan a Estados Unidos lo hacen desde Centroamérica. De acuerdo al Instituto de Política Migratoria, en los últimos 35 años, la población inmigrante centroamericana creció casi 10 veces. Aunque según el Banco Mundial, Honduras, Guatemala y El Salvador, -conocidos como países del Triángulo del Norte-, no registran datos macroeconómicos negativos, sus habitantes abandonan sus orígenes porque hay hambre y temen a la violencia.

Ante la crisis migratoria, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), propuso un Programa de Desarrollo Integral de El Salvador, Guatemala y Honduras; el cual cuenta con la venia del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

Historia del muro

El presidente Trump llegó con su promesa del muro que separaría a Estados Unidos de México, pero lo cierto es que esa propuesta se concretó en 1993 cuando llegó el presidente Bill Clinton al poder. Desde ese año, los demócratas comenzaron a levantar el polémico muro, el cual, a la fecha de hoy, alcanza unos mil 100 kilómetros de los tres mil 200 kilómetros de frontera entre ambos países. Rejas y planchas metálicas sirven de separación, pero la intención de Trump es profundizar la medida para frenar por completo el ingreso de manera ilegal.


POLÍTICA. El gobierno norteamericano no desiste en su idea de construir un muro para evitar la inmigración ilegal.

David Peinado / EFE

POLÍTICA. El gobierno norteamericano no desiste en su idea de construir un muro para evitar la inmigración ilegal.

En medio de las pretensiones del presidente, el grupo “We build the Wall”, recaudó $25 millones con la promesa de colaborar con la construcción de la barrera, pero fue un juez de Texas quien ordenó durante el mes de diciembre que se avanzara con la medida.

La política de Trump

Según Human Rights First la política de Trump de forzar a los solicitantes de asilo a que esperen en México, ha generado más de 350 casos de violación, secuestro, tortura y otros crímenes en ese país. Un informe similar del Centro de Política Inmigratoria que surgió luego de una entrevista a más de 600 solicitantes a la espera en México confirmó esta nueva crisis innecesaria de la administración.

En medio de la crisis migratoria, la administración de Trump acordó con el gobierno del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, cuatro medidas para alcanzar una solución a la creciente migración centroamericana. La decisión se tomó por considerar que existe una emergencia humanitaria, de acuerdo a la declaración conjunta emitida.

El acuerdo suspendió la imposición de aranceles que el presidente Trump aplicaría a todas las importaciones mexicanas.

Tras el acuerdo entre ambos países, los arrestos y las deportaciones en México se multiplicaron rápidamente. De acuerdo a lo reseñado en el New York Times, la decisión generó miedo entre miles de centroamericanos y nativos de otras naciones en los refugios para migrantes y hoteles económicos en el sur de México.

Inmigración por necesidad

Según la directora para México del Derecho de los Migrantes, Maureen Meyer, el plan de la CEPAL presentado para el desarrollo de Centroamérica, aproxima una ruta sobre lo que deben impulsar los gobernantes de la región.

Meyer considera que los centroamericanos emigran por crisis económica pese a que no hay altos índices inflacionarios y por motivos de violencia y seguridad personal . A su juicio hay falta de oportunidades de educación y de programas de salud, lo que genera que, pese a que Estados Unidos mantiene una política migratoria desfavorable para quienes llegan de manera ilegal, se convierta en la primera opción al momento de buscar otro destino.

“Se debe fortalecer el estado de derecho en los países centroamericanos, mejorar la seguridad y combatir la corrupción, la que desvía recursos que pueden ser enviados para atender a la gente”, dijo la experta en una entrevista exclusiva para El Tiempo Latino.

A juicio de Meyer, esta iniciativa que promueve la CEPAL podría tener éxito dependiendo de los próximos años que le restan de gestión al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, de la cooperación internacional y de cómo contribuyen los países de Centroamérica. “Por ahora es una propuesta, pero faltan muchos detalles”, sentenció.

La inmigración no solo ha sido de hombres sin compañía. En su mayoría son familias  centroamericanas que escapan de la violencia y pobreza de sus países. Trump, para frenar esa realidad, primero, forzó el acuerdo con México prácticamente, lo que obligó a AMLO a tomar medidas y luego con Guatemala, al amenazar con tomar acciones en lo comercial si no se aceptaba ser el tercer país seguro, medida que consiste en que quienes quieran solicitar refugio o asilo en Estados Unidos y previamente han pasado por Guatemala, deberán hacer la solicitud y esperar en este último país. La administración de Trump también ha llegado a acuerdos similares con Honduras y El Salvador.

Incidencia en ola migratoria

Durante el mes de octubre, las detenciones a inmigrantes indocumentados en la frontera sur de Estados Unidos descendieron a 42 mil. En mayo, la cifra alcanzaba las 132 mil personas detenidas que en medio de la crisis personal, buscaban una mejor oportunidad en Estados Unidos.

De acuerdo a las declaraciones del comisionado interino de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, Mark Morgan, la cifra representa una caída de 70% en comparación a los datos del segundo trimestre del año 2019, lo que se podría atribuir a las políticas del presidente Donald Trump, las cuales buscan frenar la inmigración ilegal al país. La Oficina registra que en el mes de noviembre detuvieron a 33 mil 510 personas, lo que sería la sexta disminución mensual consecutiva, la cual se atribuye a los acuerdos entre Estados Unidos y AMLO, quién a través de su gobierno, reforzó controles extranjeros y militarizó la frontera de México para evitar la subida de aranceles de parte de la administración Trump.

Limitaciones migratorias

A juicio de la abogada especialista en inmigración, Ruby Powers, en 2015 cientos de personas pidieron la ciudadanía porque querían votar en las elecciones de 2016, pero ahora lo hacen porque no quieren perder la residencia permanente. La abogada, quien declaró a la BBC, consideró que hay miedo dentro de la migración legal en Estados Unidos.

«Algunos estaban esperando una reforma migratoria pero les estamos recomendando que si pueden solicitar algún tipo de permiso que mejore su situación, que lo hagan ahora», dijo al medio.

La también integrante de la Asociación Estadounidense de Abogados de Inmigración (AILA, por sus siglas en inglés), consideró que el presidente Trump busca reducir el número de inmigrantes legales, especialmente trabajadores calificados, a refugiados y a solicitantes de asilo. Esto tendría relación con el espaldarazo que dio el mandatario a la propuesta legislativa llamada “Ley de Reforma de la Inmigración Estadounidense para un empleo fuerte”; decisión generada en agosto de 2017, la cual llevarían a reducir 50% la migración.

Rechazo a permisos

Inmigrantes ven con suspicacia la decisión de Trump, de rechazar los permisos de residencia o ciudadanía para los beneficiarios de programas sociales. Durante el mes de octubre, dos jueces de Nueva York y California bloquearon la decisión del mandatario que impedía la posibilidad de obtener residencia permanente a los inmigrantes que hayan recibido ayuda pública.

El pasado mes de agosto, la Oficina de Inmigración de Estados Unidos anunció un cambio en las normas que ampliaba la definición de “carga pública” de un individuo, es decir, su carga para las arcas del Estado. Aquellos inmigrantes que recibieran una ayuda pública durante más de 12 meses en un periodo de 36 meses serían considerados una cara pública y se tendrá en cuenta para negarle su petición de residencia legal permanente.

California y Nueva York, son, de acuerdo a registros del gobierno de Trump, los dos estados con más migrantes en Estados Unidos. Las fiscalías de estas regiones presentaron la demanda por considerar que la norma iba a disuadir a personas trabajadoras y limitar a los familiares de acceder a programas fundamentales de salud, alimentación y vivienda.

¿Por qué emigrar a EE.UU?

La razón, según expertos, es por supervivencia económica y violencia. Trump ha querido resaltar de manera exajerada, hasta llegar a llamar criminales a los inmigrantes, las consecuencias negativas de la inmigración, pero ella no es un delito sino una búsqueda por parte de los inmigrantes de buscar protección internacional amparado en las propias leyes de los Estados Unidos.

La magister en Ciencia Política, de la Universidad Simón Bolívar, en Venezuela, Claudia Vargas Ribas aseguró que la emigración más allá de ser una alternativa, se ha convertido en una necesidad porque no existe manera de cubrir los compromisos que se tienen como ciudadano y el país de origen no ejecuta políticas públicas que pudiesen cambiar los aspectos económicos.

Mientras Trump busca afianzar acuerdos con Guatemala, país que recibe a los migrantes que buscan asilo político en Estados Unidos, la inmigración, aunque ha disminuido en la frontera sur, sigue siendo un problema. El mandatario fue el primero en afianzar lazos con el presidente electo de Guatemala, Alejandro Giammattei.

  • El nombre de la fuente fue modificado a Rosita, por petición de la misma, para resguardar su integridad.

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