En una votación este miércoles, el Departamento de Salud Pública de Massachusetts votó a favor de adoptar unas nuevas regulaciones para los dispositivos de vapeo, que se espera reduzcan el negocio de vender líquidos con nicotina con sabores dulces y mentolados.
El gobernador Charlie Baker fue el primero en instituir la prohibición, a través de una declaración de emergencia realizada en septiembre, lo que hizo que Baker fuera el primero y único gobernador en hacerlo.
Se tenía previsto que la prohibición expirara el 24 de diciembre, pero Baker anunció a finales del mes pasado que expiraría hoy, 11 de diciembre, momento en el que el DPH expondría sus planes para supervisar la industria del vape.
Después de la votación de este miércoles, las tiendas que cumplan con las regulaciones podrán seguir vendiendo los productos para vapear, tan pronto como las regulaciones sean archivadas en la oficina del Secretario de Estado.
Entre las nuevas regulaciones está que las tiendas que venden vapes coloquen carteles que adviertan a sus clientes obre la amenaza de enfermedades pulmonares, además de regirse bajo las nuevas reglas, que incluyen que los e-cigs deben ser vendidos detrás de los mostradores de las tiendas.
“Un nuevo límite de potencia limitará la nicotina en los cigarrillos electrónicos a 35 miligramos por mililitro, lo que excluirá al menos algunos productos fabricados por el popular minorista Juul”, reseñó Boston Magazine.
“No entendemos qué es lo que está causando estas enfermedades”, dijo el miércoles la comisionada de Salud Pública Mónica Bharel. “Desde el punto de vista de la salud pública, no podemos recomendar que nadie use productos de vapor o e-cigarrillos en este momento. Lo que hacen las regulaciones es permitir un marco regulatorio y legal para limitar el acceso a estos productos, poner advertencias y señales para que la gente pueda entender su riesgo y, lo que es más importante, limitar el acceso para los jóvenes y los jóvenes”.
Con información de Boston Magazine