La violencia del sábado por parte de la Policía de Daniel Ortega valió para la pronta reacción del secretario general de la OEA, Luis Almagro, quien demandó de inmediato una pronta liberación de los más de 60 detenidos.
“Exigimos la liberación de las y los detenidos en las manifestaciones en Nicaragua. No se puede avanzar hacia una negociación creíble si al momento de sentarse a la mesa se reprimen protestas legítimas”, exhortó Almagro por medio de Twitter.
Añadió que “debe cesar de inmediato la represión por los presos políticos en Nicaragua”.
En el mismo tono se pronunció la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la ONU, ante los hechos de violencia en ese país: “El Estado debe cesar ataque a periodistas y manifestantes que se expresaban pacíficamente por la liberación de presos políticos, y debe dar información sobre detenidos y heridos”.
El sábado, la Policía de Ortega utilizó la violencia contra opositores que intentaban manifestarse por la liberación de cientos de presos políticos. Arrestó a más de 60 personas, incluidos personajes reconocidos, pero no evitó las protestas en contra de Daniel Ortega.
EE.UU. expresa su preocupación
Estados Unidos expresó su preocupación por la violencia policial en Nicaragua, que dejó un saldo de más de 60 detenidos.
El “gobierno de Estados Unidos manifiesta su preocupación por informes de violencia policial ejercida contra manifestantes”, informó la embajada estadounidense en Nicaragua en un mensaje público.
“Llamamos a autoridades nicaragüenses a cesar uso de fuerza excesiva contra manifestantes pacíficos y periodistas que ejercen su derecho a libre expresión y de prensa”, agregó la sede diplomática de Estados Unidos.
La Dirección de Operaciones Especiales (DOE), un cuerpo de élite de la Policía, invadió propiedades privadas, incluidos varios centros comerciales y gasolineras, para ejecutar sus operativos, en los que dispararon con armas de guerra, con el fin de evitar una protesta para exigir la libertad de cientos de personas presas por protestar.