Nicolás Maduro, declarado usurpador de la presidencia de Venezuela por el Parlamento, buscó ayuda en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) para hacer frente a las sanciones impuestas por Estados Unidos a Petróleos de Venezuela (Pdvsa).
El régimen venezolano alegó las consecuencias en los precios del crudo, así como las posibles implicaciones para los otros productores de la OPEP. Sin embargo, el grupo de países se negó a ofrecer una declaración formal, dijo una fuente a la agencia Reuters.
La solicitud la hizo Maduro en una carta dirigida a Mohammad Barkindo, secretario general de la OPEP, con fecha del 29 de enero.
“Nuestro país espera recibir la solidaridad y el apoyo total de los países miembros de la OPEP y su Conferencia ministerial, en la batalla que tenemos actualmente contra la intrusión ilegal y arbitraria de Estados Unidos en los asuntos internos de Venezuela”, se lee en la misiva reseñada por Reuters.
La OPEP ha expresado no preocuparse por la política internacional sino por las normas petroleras.
Maduro sufre la mayor crisis de legitimidad desde que asumió el poder en 2013. Juan Guaidó, presidente del Parlamento y jefe de Estado interino, fue reconocido por Estados Unidos, la mayor parte de los países latinoamericanos y las potencias europeas.
