No hay duda de que tener hambre puede hacer que llegar al final del día sea muy difícil. Es difícil pensar, y es difícil hacer cualquier tarea, incluso cuidar de sí mismo. Para aquellos que están enfermos, tener hambre o no tener comida es un problema más grave. ¿Cómo puede alguien concentrarse en tomar sus medicamentos o siguiendo los consejos del médico para tratar una enfermedad, ya sea corta o larga duración, si no saben de dónde y cuándo van a comer de nuevo?
Hoy en día, los médicos entienden que una dieta nutricional es importante para una buena salud, y para el tratamiento y la prevención de enfermedades. Muchos médicos también creen en la «alimentación como medicina» y utilizan la buena nutrición como manera diferente de proporcionar la atención médica. La tendencia de la «alimentación como medicina» reconoce la importancia de los alimentos saludables para tratar las enfermedades crónicas. La modificación de la ingesta nutricional de los pacientes es una forma básica pero importante de prevenir o tratar problemas de salud comunes, como diabetes, presión arterial alta y cardiopatía.
Sin embargo, no es suficiente que los doctores le digan a sus pacientes que coman mejor y eviten una dieta con demasiada sal, azúcar, grasas insalubres o alimentos procesados. Los médicos deben saber que a menudo la raíz del problema es el acceso a los alimentos: muchas personas no tienen acceso a una cantidad suficiente de alimentos saludables para ellos o sus familias. El Greater Boston Food Bank estima que uno de cada diez hogares en Massachusetts no tiene los recursos para comprar alimentos suficientes. No tener acceso a los alimentos puede dificultar que los miembros de la familia permanezcan saludables. Una vez que los pacientes tienen acceso a una buena nutrición, ellos y sus proveedores de atención médica pueden enfocarse en otras necesidades y tratamientos de salud. En algunos casos, usted puede incluso evitar tener que ir a la sala de emergencias o al hospital, que también puede ayudar a reducir los costos de la atención médica. Un estudio reciente patrocinado por el Greater Boston Food Bank estima que, con un acceso adecuado a los alimentos, Massachusetts podría haber salvado al menos 2.4 billones de dólares en costos de atención de salud.
La buena noticia es que hay organizaciones comunitarias y proveedores de servicios de salud que trabajan para proporcionar acceso continuo a los alimentos nutritivos para personas con enfermedades graves o crónicas. Mientras que la tendencia de la «comida para la medicina» sigue creciendo, más recursos se hacen disponibles para prevenir y tratar enfermedades con la ayuda de alimentos adecuados.
Si usted está enfermo o sufre de una condición crónica y tiene dificultad consiguiendo alimentos, dígale a su médico, enfermera o a cualquier otro proveedor de atención médica. Informarles que no tiene acceso a alimentos nutritivos y que es un primer paso importante para mejorar su salud. Sus proveedores de atención médica le pueden ayudar a buscar soluciones que ayudarán a mejorar su salud. Las soluciones pueden ser programas basados en la comunidad que ponen a disposición verduras frescas o programas de entrega de la comida adaptados a sus necesidades alimenticias. Una vez que se establezca una relación de confianza con su médico o enfermera, puede trabajar con ellos para asegurar que su cuerpo recibe los nutrientes que necesita para mejorar su salud.
La Dra. Lori Tishler es vicepresidenta de Asuntos Médicos en la Commonwealth Care Alliance® (www.commonwealthcarealliance.org), una organización de atención médica sin fines de lucro basada en la comunidad que se dedica a mejorar la atención de las personas que califican para MassHealth (Medicaid) y Medicare, y tienen necesidades médicas, sociales y de salud conductual complejas, incluidas personas discapacitadas.
