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Félix D. Arroyo salió del hospital tras sufrir paro cardíaco

El registrador de testamentos y familias del condado de Suffolk, Félix D. Arroyo, se ha recuperado de un paro cardíaco que sufrió el pasado 4 de mayo, y que lo mantuvo hospitalizado bajo cuidados intensivos por varios días.

En una breve conferencia de prensa que tuvo lugar en el Hospital General de Massachusetts este martes, el doctor Michael Silverman, cardiólogo y médico de cuidados intensivos que estuvo liderando el caso, explicó que Arroyo fue dado de alta del hospital después de que mostró una continua y gran recuperación.

El incidente ocurrió en las inmediaciones de la Alcaldía de Boston el pasado viernes 4 de mayo, cuando Arroyo fue hallado sin signos vitales por el sargento Roman Colón, del Boston Municipal Protective Services, quien de inmediato procedió a aplicar técnicas de primeros auxilios y reportó la emergencia.

El doctor Silverman dijo que la ayuda de este oficial fue «crítica» y jugó un papel fundamental en que Arroyo esté vivo. «Me siento agradecido de haber estado en el momento y lugar preciso. Fui como un milagro, un ángel. Se siente bien», dijo Colon, quien ha trabajado para la Alcaldía de Boston por más de 18 años.

La ambulancia acudió al llamado rápidamente y Arroyo fue trasladado al Hospital General de Massachusetts, donde los médicos tuvieron que ayudarle a controlar la presión sanguínea y respiración, para tratar de preservar su función cerebral. Desafortunadamente, cuando llegó a la sala de emergencias «Arroyo no estaba respondiendo comandos ni estaba tan despierto como hubiésemos querido, y hubo que llevarlo a la sala de cuidados intensivos cardiológicos», dijo Silverman.

«Se trataba de un proceso complejo, y nunca hay certeza de quién se va a despertar y quién no», contó el médico en la conferencia de prensa. «Básicamente tenemos que darles tiempo a los pacientes para ver si son capaces de recuperarse. Arroyo fue puesto en coma, y mostró recuperación cerebral y mejoras graduales día a día».

Silverman contó que una mañana Arroyo comenzó a reaccionar y a «seguir los comandos», y posteriormente su recuperación fue en ascenso progresivo. «Siempre es difícil de predecir quién se despierta de un coma, y hay un tremendo espectro del grado de recuperación». Citó estadísticas de la Sociedad Americana de Cardiología, según las cuales sólo un 10 a 11 por ciento de las víctimas de un paro cardíaco fuera del hospital sobreviven.

El Registrador Arroyo, de origen puertorriqueño, fue el primer latino en servir en el Concejo Municipal de Boston y en el Comité Escolar de la ciudad. También es el primer latino que resultó elegido para ocupar el puesto de registrador de testamentos y familias, y es un miembro muy querido y respetado de la comunidad puertorriqueña de la ciudad.

El médico recalcó que «fue un trabajo de equipo tremendo», desde la respuesta inicial del sargento, el personal médico que pudo responder al llamado rápidamente, y el personal médico y de emergencia del hospital.