El martes 9 de enero el Presidente Donald Trump se reunió en la Casa Blanca con un grupo de demócratas y republicanos miembros del Congreso en un esfuerzo para reavivar la conversación sobre inmigración que está estancada, y urgió a los legisladores a aprobar una “ley del amor” para proteger a algunos inmigrantes indocumentados de la deportación.
Trump expresó confianza en que un acuerdo sobre el destino de los Dreamers –inmigrantes que llegaron a EEUU de forma irregular en su infancia- sería factible antes del plazo del 5 de marzo que él fijó y de que expiren en masa los permisos emitidos a unos 700 mil inmigrantes por el programa de la era Obama. El Presidente reiteró sus demandas por el financiamiento un muro fronterizo y recortes a algunos programas de inmigración legal, pero dijo que él dejaría a los Legisladores la tarea de llegar a un acuerdo sobre los detalles y firmar cualquier propuesta de ley que ellos pongan frente a él.
“Yo en verdad creo que los demócratas y los republicanos, la gente sentada en este cuarto, realmente quieren hacer algo”, dijo Trump.
“Mi posición va a ser lo que la gente en este cuarto formule”, dijo Trump. “Tengo mucho respeto por personas en ambos partidos. Lo que yo apruebe se apoyará mucho en lo que la gente en este cuarto me traiga. Si ellos vienen a mí con cosas que no me encanten, yo lo voy a hacer”.
Los Legisladores en ambos partidos han dicho que están esperando que la Casa Blanca de Trump especifique las demandas antes de poder avanzar con las negociaciones. Los demócratas y algunos republicanos moderados se han resistido a financiar un muro fronterizo en un momento en el que la inmigración ilegal a través de la frontera con México ha bajado de forma récord.
En una reunión extraordinaria, Trump permitió a los periodistas que se queden en la Sala del Gabinete por más de 50 minutos, mientras él y los miembros del Congreso exponían sus posiciones de negociación. Trump retó al grupo a “poner al país antes que el partido” para lograr un acuerdo.
“Vidas están pendiendo en la balanza. Tenemos el tiempo para hacerlo”, dijo el Senador Dick Durbin, demócrata de Illinois, uno de los patrocinadores originales de la legislación para legalizar a los Dreamers.
Durante la reunión, Trump también discutió otra noticias, diciendo que él estima que una contienda presidencial en la que corra la magnate de los medios Oprah Winfrey sería divertido, pero que predijo que ella se abstendría de postularse a la Casa Blanca a pesar de cierto nivel de entusiasmo entre los demócratas después de su discurso en los premios Golden Globe esta semana.
“Yo no creo que ella vaya a correr”, dijo Trump, respondiendo a una pregunta de un reportero. “Yo la conozco muy bien”.
Trump anunció en septiembre de 2017 sus planes para terminar con el programa DACA, pero les dio a los Legisladores un plazo de seis meses para llegar a un acuerdo legislativo antes de que los permisos temporales de trabajo comiencen a expirar a un ritmo de cerca de mil por día. (Cada día aproximadamente 122 inmigrantes están perdiendo sus permisos de trabajo después de no poder renovar sus aplicaciones el pasado otoño).
Pero las negociaciones habían alcanzado un punto muerto sobre cómo proceder. Los demócratas y algunos republicanos moderados están enfocados en un plazo del 19 de enero para un acuerdo de gasto del gobierno que debe aprobarse como una ventaja de negociación para llegar a un acuerdo sobre DACA. Pero las conversaciones están estancadas por las demandas de Trump para el muro fronterizo y recortes a la inmigración legal, incluyendo el final la lotería de visas y terminar con lo que el Presidente llama “migración contínua”, la práctica de que estadounidenses peticionen a miembros de la familia para que vengan con tarjetas de residencia.
Los demócratas se han mostrado reacios a aceptar nuevas provisiones importantes de seguridad fronteriza, diciendo que el llamado de la administración para una financiación de $18 mil millones para cientos de millas de muro fronterizo es costoso e innecesario cuando los niveles de inmigración ilegal se han desplomado.
Los legisladores de ambos partidos han expresado confianza en que la reunión fue productiva y dijeron que el grupo ha tenido éxito en reducir el foco de las discusiones, sin embargo ambas partes han definido el marco de la negociación en diferentes términos. Los demócratas sugirieron que ellos estaban abiertos a algunas mejoras de seguridad fronteriza pero enfatizaron que acordaron con Trump que después de que se llegue a un acuerdo sobre los Dreamers se deben realizar conversaciones más amplias sobre otros cambios al sistema de inmigración.
Pero los republicanos dijeron que ellos esperan que los demócratas discutan cuatro áreas: seguridad fronteriza, el destino de los Dreamers, la lotería de visas de diversidad y frenos a la “inmigración continua”.
Durante las conversaciones en la Sala del Gabinete, en un momento Trump pareció estar de acuerdo con la Senadora Dianne Feinstein, quien dijo que los demócratas están buscando una ley de Soñadores limpia, sin condiciones adicionales de seguridad fronteriza. Entonces, el líder mayoritario de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, republicano de California, agregó rápidamente que los republicanos quieren la seguridad (fronteriza) incluida.
Trump también dijo que él tenía la esperanza de buscar una ley de inmigración “completa” después de que los legisladores lleguen a un acuerdo sobre los Dreamers. Las leyes integrales de inmigración fallaron en Capitol Hill con los ex Presidentes Barack Obama y George W. Bush.
Traducción: El Planeta Media / El Tiempo Latino