Un canal deportivo de suramérica dio a conocer que los jugadores del equipo de fútbol chileno Universidad Católica fueron víctimas de un robo en el hotel donde se encuentran hospedados. Se presume que uno de los implicados en el hecho sería un empleado del hotel.
El suceso ocurrió cuando los jugadores regresaron del estadio Maracaná tras realizar una sesión de entrenamiento y percibieron que algunas de sus habitaciones, en el lujoso hotel Royal Tulip Rio São Conrado, habían sido violentadas.
“Clonaron las tarjetas de crédito de hasta ocho jugadores. Con las de débito, que son las que usan los más jóvenes, no lo consiguieron”, dijo el lateral Wilmer Meneses desde el citado hotel horas antes del encuentro contra los brasileños.
El zaguero reveló que, además de clonar las tarjetas, también se les llevaron dinero en efectivo a algunos jugadores con cifras que oscilan desde los 90 hasta los 300 dólares, “que eran para los gastos durante la concentración”.
Varios de los futbolistas sospechan que el robo fue cometido por el propio personal del hotel, ubicado en un barrio noble de la zona sur de Río de Janeiro.
“Es un tema complicado, vinimos al país a hacer nuestras cosas y nos llega esto”, añadió el lateral.
De acuerdo con la versión de Meneses, el primero en darse cuenta del robo fue el centrocampista Matías Defederico, quien percibió que alguien había cargado a su tarjeta “un monto fuerte”, algo que luego se repitió con otros de sus compañeros.
“Parece ser que así ha sido, pero tenemos la tranquilidad de que se va a solucionar, es un detalle, una anécdota del viaje”, comentó el técnico del equipo ecuatoriano Jorge Célico.
El Universidad Católica se enfrentó este jueves al Fluminense en un partido correspondiente la ida de la segunda fase de la Copa Sudamericana en el cual cayeron 4-0.