MEXICO CITY – Durante el comienzo del campamento de entrenamiento del equipo nacional de fútbol de los Estados Unidos en Denver, Bruce Arena le dijo a sus jugadores que no esperaran una rutina normal. Después de todo, las circunstancias no eran para nada normales.
Los estadounidenses debían jugar dos clasificatorias de la Copa Mundial en 72 hora en dos países con altitud alevada- lo que demanda preparación especial y un número unusual de arranques.
Típicamente, de partido a partido, un entrenador hace algunos cambios en la formación. En este caso, luego de una victoria 2 a 0 frente a Trinidad y Tobago el jueves en Colorado, Arena planea cambiar al menos a siete jugadores o quizás al grupo entero.
“Estaba cerca de los nueve el día de ayer, pero lo reduje a siete”, dijo Arena luego del empate 1 a 1 con México el domingo. El corto tiempo entre los partidos y el impacto de la altitud en los cuerpos y mentes que no están acostumbrados, provocó la gran cantidad de movimientos.
“Para repetir la formación con la que jugamos el jueves, tendríamos que luchar bastante con la altitud”, agregó.
Con una unidad fresca, los estadounidenses salieron con un punto del Estadio Azteca y terminaron con cuatro puntos en dos partidos. Desde que comenzaron la ronda final con dos derrotas bajo la dirección del entrenador Jurgen Klinsmann, los estadounidenses (2-2-2) están invictos en cuatro juegos seguidos y de vuelta en contención para uno de los tres puestos de la región para la Copa Mundial 2018 en Rusia.
Arena invitó a 27 jugadores al campo. Para evitar una emergencia, dos de los cuatro porteros no iban a jugar. Dieciocho de los restantes 24 comenzaron al menos un partido.
Cuatro jugadores comenzaron dos partidos: DeAndre Yedlin, Michael Bradley y Geoff Cameron terminaron el partido dos veces, y Christian Pulisic duró hasta el comienzo del tiempo adicional del segundo tiempo. Hasta el jugador más resistente del equipo, Pulisic, estaba “básicamente acabado”, dijo Arena.
Arena también pidió a su grupo jugar con dos sistemas diferentes: uno estándar, enfocado en la ofensiva en casa, y otro flexible, con una alineación defensiva de visitantes. En los dos casos, el plan funcionó con los estadounidenses consiguiendo tres puntos en el partido que necesitaban ganar con urgencia (frente al último puesto, Trinidad y Tobago) y consiguieron un punto en Ciudad de México, en donde nunca han ganado un juego de clasificatoria de los años 40.
Cuando el campamento abrió el 20 de mayo, los jugadores tuvieron que enfrentar tanto las condiciones de altura (la cual requiere una especial nutrición, hidratación y sueño) y estilo de juego diferente.
En cuanto a las condiciones del ambiente, “trabajamos lo mejor que pudimos durante dos semanas para tratar de ajustarnos y nivelar un poco el juego cuando viniéramos” a Ciudad de México (a 7.350 pies), dijo Arena. “Sabemos que nunca lo lograremos del todo, pero ciertamente nos beneficiamos de la preparación durante las últimas dos semanas”.
Durante el comienzo del campamento – el primero de Arena con una alineación totalmente fuerte – el equipo trabajó sus tácticas y su capacidad física para los dos partidos. Mientras el primer partido clasificatorio se acercaba, el trabajo se enfocó exclusivamente en la estrategia frente a Trinidad y Tobago. Para finales del jueves, luego de que Politic anotara dos goles en la segunda mitad, el equipo se movió a México.
Arena dijo que desde enero él quería jugar con cinco defensas en vez de con cuatro, para poder recortar el espacio de México en el último tercio del campo y manejar la inevitable presión que se da en el Azteca.
“Le dimos vuelta en la oficina junto con los otros entrenadores”, dijo Arena. “Ellos probablemente no apoyaban realmente la idea. Pero yo estaba bastante confiado de que debíamos implementarla”.
Cuál formación usó los Estados Unidos? En la superficie era 5-4-1, pero depende de las circumstances la forma cambia. Mientras los fans y reporteros se obsesionan con detalles de formación, Arena nunca ha se ha quedado atascado en esas etiquetas, desde sus días como entrenador de la Universidad de Virgina y D.C. United.
«3-4-3, 5-2-2-1 o como quieran llamarlo”, dijo Arena. “Si de alguna manera puedes sumar 10 eso basta”.
Además de las condiciones físicas, Arena se fijó en jugadores con experiencia en alturas. El defensa Omar González y centrocampista Paul Arreola están empleados por clubes de la liga mexicana – Pachuca y Tijuana, respectivamente. Un tercer jugador de la Liga MX, el defensa Jorge Villafana, sufrió una lesión menor en el inicio en contra de Trinidad y Tobago y no estaba disponible el domingo.
Algunos otros han jugado en altitudes a nivel de clubes o equipos nacionales.
Las capacidades físicas y la altitud tienen menos impacto en los porteros. Sin embargo, Arena reemplazó a Tim Howard con Brad Guzan. Por qué? Con 38 años, Howard no se recupera entre los partidos tan rápido como antes. Además, Arena dijo, la cirugía de ingle de Howard el otoño pasado ha impactado su habilidad de pateo. Y Arena explicó que en contra de México el portero de los Estados Unidos se vería sacando pelotas y parando coles mucho más seguido que con Trinidad y Tobago, por ejemplo.
Guzan, de 32 años, concedió un gol de Carlos Vela a mitad de la primera mitad y vio como Hector Herrera le pego al arco en la segunda mitad. A parte de eso, manejó bien la portería y las salvadas de rutina.
Michael Bradley, el capitán de los Estados Unidos, le había dado el liderazgo a su equipo al sexto minuto con un pelota desde 40 yardas que voló sobre el portero Guillermo Ochoa. Bradley también le pegó al poste desde la distancia más adelante en el partido.
A parte de conseguir puntos, los estadounidenses se unieron como equipo luego de haber perdido su camino bajo la dirección de Klinsmann.
“Esto es crítico porque ahora hay menos reuniones al año”, dijo Arena. “La mayoría de estos jugadores desaparecerán hasta septiembre, y que se vayan con esa unión que adquirieron en estos últimos cuatro juegos es bastante importante. Así que estoy optimista de que la próxima vez podamos hacerlo mejora… Los jugadores han respondido muy bien. Nos estamos volviendo un equipo”.
Los estadounidenses serán los anfitriones en el juego contra Costa Rica el 1ro de septiembre y visitará Honduras cuatro días después.
Arena asemblará una mezcla de jugadores regulares y secundarios por la Copa de Oro CONCACAF Gold Cup para julio en varias localidades de los Estados Unidos.
