Los oficiales de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) arrestaron a cinco personas indocumentadas en Lawrence, Massachusetts, el miércoles pasado, de las cuales tres habían comenzado el proceso de solicitud de la Green Card.
Al menos tres de las personas detenidas habían acudido a la oficina de inmigración para solicitar la Green Card la cual les habría dado el derecho de permanecer en los Estados Unidos.
Los cinco incluyen al menos uno de Lawrence, Leandro Arriaga, que fue ordenado inicialmente deportado hace 16 años, cuando llegó a Puerto Rico en un barco con 60 más de la República Dominicana tratando de hacer su camino a los Estados Unidos.
En unas declaraciones, ICE afirmó que sus oficiales estaban «respondiendo a un proceso de investigación» cuando ellos se presentaron en la oficina del USCIS en Lawrence.
Cuando se le preguntó si las cinco personas detenidas tenían antecedentes penales, un portavoz de la agencia respondió que dos residentes no tienen ninguno y los otros tres tienen «múltiples violaciones de tráfico» a sus nombres.
Brian Doyle, abogado de un ciudadano brasileño detenido, manifestó que su cliente sabía que podría arriesgarse a la deportación mediante la solicitud de una Green Card con los Servicios de Inmigración y Ciudadanía de los Estados Unidos, pero tomó la decisión de asistir a la reunión.
Luego de que la mujer había sido interrogada por 40 minutos,un agente de ICE entró en la oficina para informarle que sería arrestada, afirmó Doyle. Ahora, la madre de tres se encuentra bajo custodia en la Casa de Correcciones del Condado de Suffolk y podría ser deportada a Brasil, un país que no ha visitado en 15 años.
Se trata de una pequeña empresaria casada con un ciudadano de los EE.UU. y no tiene antecedentes penales, ahora se encuentra en un «catch-22″(referido a las reglas, regulaciones o procedimientos a los que un individuo está sujeto pero no tiene control, porque combatir la regla es aceptarla), posible gracias a la campaña de inmigración del presidente Trump.
En este caso, si la persona quien solicita el inicio del proceso legal no aparece a la cita pautada, se entiende automáticamente que no quiere seguir el proceso. En cambio si asiste a la cita, entonces dar el primer paso en el proceso es tomado como una irregularidad y se apresa a la persona.
Roxana Rivera, la vicepresidenta de 32BJ SEIU, uno de los sindicatos más grandes que representan a trabajadores de inmigración en Massachusetts y los Estados Unidos, manifestó que “la reciente detención de múltiples solicitantes de tarjetas verdes en Lawrence es otra prueba de que el intento sistemático de la administración Trump de criminalizar a los inmigrantes no es sólo un asalto a los derechos civiles de las comunidades de color, sino un camino peligroso que ya está teniendo consecuencias dramáticas en las comunidades de todo el país”.
Bajo el mandato del presidente Obama, los agentes de ICE fueron instruidos para no realizar incursiones de la inmigración bajo tales circunstancias. Pero con Trump a la cabeza, la policía de inmigración ha sido autorizada para acelerar los arrestos en los tribunales, lugares de trabajo y hogares de todo el país.