En las últimas dos décadas, la violencia ha salpicado a futbolistas latinoamericanos. Algunos vinen para contarlo y otros no han sido tan afortunados.
Arnold Peralta, jugador de la Selección de Honduras, quien defendió por última vez los colores catrachos ante la Selección Mexicana, es la más reciente víctima. Aquí un repaso de otros jugadores que lo acompañan en esta infortunada lista.
Salvador Cabañas (América) / Paraguayo:
Herido de gravedad el 25 de enero de 2010. Recibió un disparo en la cabeza en un bar de la Ciudad de México
Fernando Cáceres (retirado) / Argentino:
Herido de gravedad el 1 de noviembre de 2009. Recibió un disparo en la cabeza cuando trataban de robarle su vehículo en Ciudadela, cerca de Buenos Aires.
Albeiro ‘Palomo’ Usuriaga (retirado) / Colombiano:
Asesinado el 11 de febrero de 2004. Recibió varios disparos en la calle a manos de un sicario.
Andrés Escobar (Atlético Nacional) / Colombiano:
Asesinado el 2 de julio de 1994. Recibió varios disparos en la cabeza en el estacionamiento de una discoteca en Medellín por haberse metido un autogol.
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