Parece que la credibilidad de la FIFA se cae a pedazos. Primero fue la detención y extradición de varios dirigentes del organismo; después la suspensión de su presidente Joseph Blatter y ahora un nuevo escándalo podría salir a la luz.
Y es que la Federación Alemana de Fútbol (DFB) dice investigar un pago de 6,7 millones de euros de organizadores de Copa del Mundo 2006 a la FIFA que se habría «desviado».
Esto surgió luego de que el diario Der Spiegel acusara al comité organizador de utilizar una cuenta secreta para comprar votos, sin embargo la DFB niega que el Mundial 2006 haya sido «comprado».
El semanario asegura que, según informaciones a las que ha tenido acceso y cuyas fuentes no revela, los organizadores del Mundial abrieron en 2000 una cuenta secreta en la que el entonces jefe de la multinacional alemana Adidas, Robert Dreyfuss, ingresó 10,3 millones de francos suizos, (unos 10,8 millones de dólares).
«El dinero se usó, según los indicios, para comprar los cuatro votos asiáticos, de los 24 que tiene el comité ejecutivo de la FIFA», publica Der Spiegel.
Además añade que el comité organizador devolvió luego a Dreyfuss 6,7 millones de euros haciendo una triangulación financiera con ayuda de la FIFA.
Al respecto la FIFA anunció que investigará la exitosa candidatura de Alemania para el Mundial de 2006.
«Estas son acusaciones muy graves», aseguró el organismo, que indicó que se abrirá una investigación independiente para evaluar el caso.
www.diariorepublica.com