El Metro de Boston tendría que hacer un gasto de $7300 millones para que sus autobuses, trenes y estaciones estén en buenas condiciones de trabajo, de acuerdo con funcionarios del T.
La cifra supone un aumento sustancial sobre una estimación preliminar emitida en marzo, de $6700 millones. Y las autoridades dijeron el lunes que el presupuesto podría crecer aún más en los próximos meses a medida que perfeccionan su comprensión de la magnitud del problema.
El mal estado de los trenes del sistema y del llamado «tercer carril» se considera una causa importante de las averías que sufrió la MBTA este pasado invierno.
El debate sobre los arreglos a la infraestructura de la MBTA ha sido muy polémico. La mayoría de los observadores coinciden en que el Estado tiene que hacer un mejor trabajo de reparación y modernización de los trenes y los interruptores existentes del T. Pero Baker, quien asumió el cargo en enero, sostiene que el T se ha distraído de su misión central en las últimas décadas en un afán por expansión.
Defensores del transporte público añaden que el T tiene que continuar con su expansión con el fin de fomentar el crecimiento económico en la región. El problema fundamental, según ellos, es una histórica falta de inversión que ha agravado los problemas de mantenimiento.
