Cuatro jóvenes que sobrevivieron a una explosión de gas en un mercado en Honduras están recibiendo atención médica gratuita en un hospital de Boston que se especializa en el tratamiento de quemaduras.
Los cuatro niños estaban entre más de 70 personas heridas cuando un cilindro de gas de repente explotó el 20 de febrero en la capital de Honduras. Los niños, de edades comprendidas entre 6 meses y 16 años, fueron trasladados casi 3.800 kilómetros al Shriners Hospital for Children en Boston gracias a organizaciones benéficas locales e internacionales.
Paola Matute Porter, de 9 años, es la más gravemente herida de los cuatro y sufrió quemaduras en más del 40 por ciento de su cuerpo.
Ella se ha sometido a dos operaciones para injertar piel sobre sus brazos, manos y dedos. Se espera que Paola logre recuperarse por completo, pero todavía tiene un largo camino por delante. Pueden pasar semanas antes de que pueda regresar a casa.
La explosión, que dejó ocho personas muertas y cerca de 70 lesionados, ocurrió el 20 de febrero en la Feria del Agricultor y Artesano que funciona solamente los viernes y sábados en la capital hondureña, y fue provocada por el estadillo de un cilindro de gas.
