ir al contenido

Preguntas y respuestas sobre la posibilidad de que Boston sea sede olímpica en 2024

El Comité Olímpico de Estados Unidos eligió el pasado jueves oficialmente a Boston como la ciudad candidata para convertirse en la sede de los Juegos Olímpicos de Verano en 2024. Pero aún falta un largo trecho para determinar qué país será el anfitrión definitivo del evento deportivo.

Durante los próximos dos años, Boston se enfrentará a otras ciudades de todo el mundo en la competencia por convertirse en anfitrión de un evento que, aunque ciertamente genera gran interés mundial, también es muy costoso.

Las investigaciones han demostrado que se requiere de una inversión de miles de millones de dólares para un evento como este, que en realidad tiene poco impacto en el turismo e implica construir estadios gigantes y otros proyectos masivos que tienen poco uso después de que se acaba el evento.

¿Los Juegos Olímpicos vienen definitivamente a Boston?

Ayer jueves supimos que Boston venció a San Francisco, Los Angeles y a Washington DC para convertirse en candidata oficial de Estados Unidos. Sin embargo, la competencia más dura está por venir.

Roma ya ha presentado su candidatura oficial para los Juegos Olímpicos de 2024, y muchas otras ciudades han expresado un interés similar, incluyendo París, Berlín, Johannesburgo, Casablanca, Melbourne, San Petersburgo  y Estambul.

Estas ciudades tienen un plazo hasta septiembre de 2015 para presentar sus licitaciones. Si al menos una fracción de ellas licita, ya se abre una competencia fuerte para Boston.

¿Existe un plan organizado? ¿Cómo lucirían unas olimpíadas en Boston?

No conocemos mucho acerca de los planes concretos para unos Juegos Olímpicos en Boston. El proceso no está siendo organizado por la alcaldía o el estado, sino por un grupo sin fines de lucro conformado por líderes empresariales y culturales llamado «Boston 2024 Partnership». En la descripción de la propuesta,  el grupo ha hecho hincapié en la importancia de unos Juegos Olímpicos compactos, con muchos lugares accesibles a través del transporte público. También existe la esperanza de mantener bajos los costos mediante la asociación con universidades locales y la construcción de estructuras que pueden ser reutilizados para otros fines.

Sin embargo, Boston no tiene un gran estadio, un centro acuático o un velódromo (para el ciclismo), y estas son tres de las instalaciones olímpicas más caras. Peor aún: encontrar lugares para construirlos podría ser tan difícil como conseguir el dinero. Por ejemplo, aunque se ha hablado de la construcción de un estadio olímpico en Widett Circle, cerca de la I-93 al sur de la ciudad, ya hay una empresa mayorista de carnes y mariscos en ese lugar, cuyos propietarios no parecen dispuestos a vender el terreno.

¿Cuánto costaría?

Las estimaciones de “Boston 2024 Partnership” sugieren alrededor de 5 mil millones de dólares para ejecutar los juegos y otros 13 mil millones en mejoras al transporte público ya aprobadas.

Los Juegos Olímpicos más recientes han costado por lo menos 15 mil millones de dólares, ya veces mucho más.

¿Quién paga?

Si bien los Juegos Olímpicos generan algunos ingresos -por venta de entradas, publicidad y derechos de televisión- no es por lo general suficiente para cubrir el costo total de inversión. “Boston 2024 Partnership” ha dicho que los contribuyentes de Massachusetts no tendrían que compensar la diferencia, pero por ahora no hay plan para asegurarlo.

¿Cuáles son los beneficios de ser el anfitrión?

Los juegos son buenos para las empresas de construcción locales y proporcionan una corta ráfaga de felicidad para los residentes locales, cuyda ciudad se convierte en el centro de atención mundial. Más allá de eso, los beneficios probados son pocos.

El turismo en realidad disminuyó durante los Juegos Olímpicos de Londres y Beijing, y muchos economistas han buscado evidencia de crecimiento económico relacionado con los Juegos Olímpicos pero no han encontrado mucho.


     ¿Quién apoya y quién no?

A pesar de contar con el apoyo de una amplia gama de líderes políticos (incluyendo el alcalde Martin Walsh), la candidatura de Boston a los Juegos Olímpicos ha encontrado una oposición sustancial. Mucha más oposición que la que la que ha habido en otras ciudades.

La cara más pública de la oposición ha sido un grupo llamado “No Boston Olympics», que ha estado trabajando para evitar lo que ven como una distracción peligrosa de las necesidades más apremiantes de la Commonwealth.

A medida que transcurra el tiempo y los planes se definan mejor, se sabrá más información y más detalles sobre la propuesta olímpica.

Muchas universidades y empresas manifestarán su apoyo o rechazo defibitivom y el panorama será más claro. Amanecerá y veremos.

¿Qué piensas tu sobre la posibilidad de que Boston sea la sede olímpica en 2024? ¿Te parece que es una buena o una mala idea? Comparte tus comentarios.

Últimas Noticias