A todas nos gusta pensar que la temporada navideña saca a relucir lo mejor en nosotras. Falso. Siento que muchas personas son más gruñonas durante las fiestas que en otras épocas del año.
Para mí, la Navidad se ha convertido en algo tan comercializado que se me hace más difícil contagiarme del espíritu navideño. Pero algo pasó el día después del Día de Acción de Gracias este año que abrió mi mente y mi corazón a lo que realmente es la Navidad.
Mientras estaba sentaba en el porche de mi amiga Anna bebiendo vino, fui testigo de una cosa maravillosa, amor fraternal. Eric, el esposo de Anna, y su vecino, Steve, estaban decorando sus casas para las fiestas. Pero no solamente estaban decorando al mismo tiempo; decoraban para complementar sus casas, la una con la otra. La camaradería era aparente, el júbilo obvio y la risa contagiosa.
Verlos trabajar hombro a hombro, ayudándose uno a otro como si se leyeran la mente me llenó de lágrimas de felicidad. Cada temporada navideña me entero de peleas entre vecinos porque a uno no le gusta el estilo del otro o uno siente que sus decoraciones llaman demasiada atención. O escucho historias de vecinos que intentan superar al otro cada año. Este tipo de rivalidad quita la alegría de las fiestas, especialmente si uno vive al lado de uno de esos vecinos.
Como madre de dos niños pequeños, a veces me cuesta tener presente el sentido de la Navidad en todo momento. Por eso esta simple celebración decorativa me conmovió tanto. Es bueno saber que hay personas a las que les importan sus vecinos y que las historias negativas que escuchamos, con un poco de suerte, son la excepción.
Una de las cosas que me encantan de las fiestas de Navidad es que nos da la excusa para ser creativas. Como diseñadora de interiores, tengo que confesar que me encanta decorar mi propio apartamento para que mis invitados estén impresionados desde el momento que entran por la puerta. Aunque es muy divertido, recuerde que con la electricidad no se juega.
La causa principal de incendios durante las fiestas es el uso inapropiado de cables, enchufes y velas. Por eso, este año y los años que vienen, por favor asegúrese de que sus decoraciones navideñas no solamente son bonitas sino seguras para toda la familia.
Cosas importantes para recordar:
• No use ningún hilo de luces con cordones raídos, deshilachados o rotos.
• Antes de usar luces exteriores, verifique las etiquetas para asegurarse que han sido certificadas para el uso exterior
• Enchufe todas las decoraciones eléctricas exteriores en circuitos con un interruptor de circuito por falla a tierra para evitar el peligro de sufrir una descarga eléctrica.
• Nunca use velas encendidas en el árbol de Navidad o a su alrededor
• Cuando compre un árbol artificial, esté seguro de que la etiqueta diga “Fire Resistant» (resistente al fuego). Aunque esta etiqueta no significa que el árbol no pueda incendiarse, indica que el árbol resistirá mejor al fuego
• Mantenga el árbol vivo tan húmedo como sea posible y riéguelo diariamente.
• Ponga el árbol por lo menos a tres pies de cualquier fuente de calor como una chimenea o radiador
• Ponga el árbol tan cerca como sea posible al enchufe para prevenir tropiezos con los cables
• Utilice no más de tres sistemas de luces de tamaño normal por cada extensión
• No ponga el árbol donde pueda impedir a la familia salir de la casa en una emergencia
• Siempre desenchufe las luces de Navidad antes de salir de la casa o dormirse
• Apague todas las velas cuando salga de la habitación o se vaya a dormir
• No deja un árbol de Navidad seco en casa o en el garaje, deshágase de él de una manera segura porque son altamente inflamables
Otros Consejos:
• No deje la comida que esté cocinando sin supervisión, esté pendiente de la estufa
• Todas las velas encendidas deben usarse en candeleros robustos y hechos de materiales no inflamables. Asegúrese de que la base del candelero sea suficiente grande para recoger la cera que gotea
• Después de una fiesta, si permite fumar en su casa, siempre busque colillas de cigarros que aun puedan estar encendidas entre y debajo de la tapicería y los cojines, así como dentro de los cestos de basura
• Limpie inmediatamente después de una fiesta. Un niño puedan levantarse temprano la próxima mañana y atragantarse con sobras o entrar en contacto con alcohol o tabaco
• Cuando sea la fiesta de otra persona, recuerde que no todas las casas son iguales, esté pendiente de su niño porque no todas las casas están acondicionadas a prueba de niños y puede haber peligros para los mismos.
¡Por último, disfrute las fiestas!
Marlene escribe en www.casalatina.com