La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, aseguró este miércoles que el presidente Joe Biden mantendrá una posición agresiva hacia los ataques cibernéticos dirigidos a empresas estadounidenses.
El presidente se reunió esta mañana con el vicepresidente Kamala Harris, el asesor de Seguridad Nacional Jake Sullivan y otros asesores para discutir los últimos ciberataques a las compañías nacionales
“En esta reunión, proporcionaron una actualización sobre su trabajo en curso, capacidad de búsqueda y resistencia; e informes, abordando los sistemas de pago y nuestros esfuerzos continuos para combatir el ransomware”, dijo Psaki a los periodistas a bordo del Air Force One mientras el presidente se dirigía a Illinois.
“(Lo que) sí discutieron es el hecho de que el presidente se reserva el derecho de responder contra las redes de ransomware y aquellas que las albergan. Esa sigue siendo su política”, añadió.
La semana pasada, piratas informáticos del gobierno ruso violaron los sistemas informáticos pertenecientes al Comité Nacional Republicano casi al mismo tiempo que un grupo delictivo vinculado a Rusia atacó a Kaseya, una empresa con sede en Miami que vende software que ayuda a otras empresas a administrar sus redes informáticas.
Entre 800 y 1 mil 500 pequeñas empresas se vieron afectadas por el ataque. REvil, el grupo de ransomware que se cree que está detrás de esto, inicialmente le dijo a cada una de las pequeñas empresas afectadas que debían pagar alrededor de $50 mil para volver a tener acceso a sus computadoras. Luego, el domingo, dijo que aceptaría $70 millones en criptomonedas para desbloquear todos los negocios a la vez.
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“Parece haber causado un daño mínimo a las empresas estadounidenses, pero todavía estamos recopilando información sobre el alcance total del ataque”, dijo Biden a los periodistas el martes en un breve intercambio después de sus comentarios sobre la pandemia del coronavirus y las vacunas.
Fuente: Eugene Scott/The Washington Post.
Traducción libre del inglés.
