Angus Chen/ WBUR
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Para millones de residentes de Massachusetts que habían estado esperando su turno para reservar una cita para la vacuna COVID-19, finalmente les había llegado el momento.
Con la promesa de que los espacios comenzarían a abrirse a las 8 am del jueves 18 de febrero, muchos de los residentes recién elegibles entraron a los sitios de registro de vacunas del estado para tratar de asegurar una cita. Por horas. Y horas. Y horas.
Dos importantes websites estatales, uno que enumera clínicas, farmacias, sitios de vacunación y disponibilidad; y otro donde los residentes pueden encontrar páginas de registro o inscribirse para citas en centros de vacunación masiva, presentaron problemas técnicos debido al pesado tráfico. Durante toda la mañana, los residentes que intentaban acceder a estos sitios web fueron recibidos con un error de «ventana de enlace incorrecta» u otra notificación del sistema. En un sitio web, un cefalópodo de cuatro tentáculos informó con tristeza a los usuarios que la aplicación web había fallado.
Los lectores y oyentes de WBUR nos escribieron para contarnos su experiencia. Algunos lograron conseguir citas, otros no. Muchos se rindieron.
«Ahora entiendo por qué llaman al gobernador Charlie Baker el ‘Eeyore Killjoy’ (término para referirse a alguien aguafiestas). ¿Cómo podrían no haberse preparado para esto?», Escribió Philip Orlando, de 65 años, de Reading, a WBUR. En un segundo mensaje, dijo que había intentado, sin éxito, reservar cita unas 200 veces.
«El sitio web del estado se bloqueó repetidamente a lo largo del día. Ahora el portal dice que ‘la clínica no tiene espacios disponibles para citas’. El fracaso total de este sistema es imperdonable. ¡Es una pesadilla!»
ELISABETH MCLEOD, 72, DE TAUNTON
«Comencé esta mañana a las 7:00 am y continué hasta la tarde. Probablemente lo intentaré esta noche también», escribió Scott Gilmour, de 65 años, de Winchester. «… El sistema me rebotaba y (siempre) volvían a aparecer los diferentes mensajes de error. Fui persistente pero no tuve suerte. Francamente, estoy realmente enfurecido y muy decepcionado».
También, de manera concreta como se expresó Carlos Ramos, de 67 años, «NO PUDE LOGRARLO. MUY DIFÍCIL».
El gobernador Charlie Baker reconoció la lucha a la que se enfrentaban los residentes y dijo que él también estaba molesto por la situación de los sitios web.
«Estoy furioso con todo esto. Ni siquiera puedo explicar lo enojado que estoy, y el personal está trabajando muy duro para arreglarlo», le dijo a GBH el jueves por la tarde. «Profesionales hicieron mucho trabajo preparándose para esto, pero claramente no fue lo suficiente».
El Centro de Comando COVID-19 del estado se disculpó «por la frustración y las molestias que los residentes experimentaron durante el transcurso del día» en un comunicado publicado el jueves por la noche, señalando que los residentes pudieron completar con éxito las 60.000 citas disponibles.
Los sitios web no fueron los únicos que experimentaron dificultades técnicas. La línea directa 2-1-1 del estado destinada a ayudar a los residentes a registrarse, tampoco pudo agendar citas a a las personas que llamaban.
«El sitio colapsó. Intenté llamar al número 211 y seguía colgado. Finalmente lo logré después de 3 horas de intentarlo, pero no pudieron darme una cita», comentó a WBUR Rosaura Quirarte-Perez de Marlborough.
«… Tonto sistema. Mal diseñado. ¿Quiénes son las personas que lo diseñaron? … ¿Por qué no contratar a 10 estudiantes del MIT (ciencias de la computación) y hacerlo bien?».
STEVE ROSENFELD, 70, DE WORCESTER
En muchos casos, las personas pudieron cargar uno de los sitios webs y comenzar el proceso de registro para una vacante. Luego, a la mitad del proceso, el portal cerraba repentinamente y tendrían que comenzar de nuevo.
En otros casos, su solicitud de cita simplemente no se ejecutó y, nuevamente, tendrían que comenzar a hacerlo. Este fue también el caso del propio Bob Oakes de WBUR , quien intentó durante seis horas y seis minutos cerrar una cita antes de lograrlo.
«Inicialmente, el sitio estaba caído. Finalmente, pude ver una lista de fechas disponibles. Tuve que elegir una y luego seleccionar una hora del día», escribió Sarah Metcalf, de 67 años, de Northampton. «… Recibía un mensaje que decía lo siento, no hay espacios disponibles en este momento. Entonces, volvía al menú, elegía otra fecha / hora y lo hacía de nuevo. Una y otra vez. … Pude, al cabo de 5 horas, saber cuántas veces lo había intentado: 57».
«Sitio bloqueado. Cuando encontré citas disponibles, tuve que completar mucha información personal, luego la cita desapareció. Debido a que la información no se guardaba, debía volver a ingresarla cada vez. Tonto sistema. Mal diseñado. ¿Quiénes son las personas que lo diseñaron? ¿Por qué no contratar a 10 estudiantes del MIT (informática) y hacerlo bien?» Steve Rosenfeld, de 70 años, de Worcester, se preguntó.
De hecho, muchos residentes cuestionaron cómo este estado, de todos los estados de la nación, podría caer tan bajo cuando Massachusetts tiene tal concentración de ciencia, tecnología y talento médico. Seguramente, dijeron, a algunos estudiantes del Instituto Tecnológico de Massachusetts no les importaría hacer de esto parte de su tesis de pregrado o maestría. ¿O qué hay de la multitud de empresas de tecnología que hacen de la creación de aplicaciones web sin problemas su actividad diaria?
«El sitio se bloqueó. Intenté llamar al número 211 y seguía colgado. Finalmente logré comunicarme después de 3 horas de intentarlo, pero no pudieron darme una cita».
ROSAURA QUIRARTE-PEREZ DE MARLBOROUGH
La compañía Everbridge de Massachusetts ayudó a West Virginia a configurar su proceso de administración de vacunas. West Virginia es ahora uno de los estados líderes del país en términos de vacunación. Quickbase, con sede en Boston, también ayudó al condado de Tarrant, Texas, a establecer su sitio web de registro de vacunas.
Uno de los ejecutivos de Quickbase, Jay Jamison, dice que el condado de Tarrant pudo procesar 500,000 solicitudes en más de un mes y hasta 40,000 por día en su plataforma, en parte porque estaban usando tecnología de aplicación web de vanguardia. Ese no siempre es el caso de los sistemas gubernamentales, dice Jamison.
«La tecnología puede ser muy, muy difícil de adaptar a las necesidades y demandas del momento, y para mí esa es la raíz del problema», dice Jamison.
Una de esas tecnologías que el estado podría usar es un servicio de computación en la nube que aumenta la potencia del servidor para satisfacer la demanda. Olivia Adams, una desarrolladora de software que creó MACovidVaccines.com mientras estaba de baja por maternidad, utiliza uno de esos servicios de Amazon. Es por eso que su sitio web no se bloqueó cuando sí lo hizo el del estado, piensa.
«Es frustrante que nuestro sitio sea lo suficientemente resistente para manejar el tráfico, pero los sitios web oficiales no lo son», dice.
Este problema era completamente previsible y prevenible, dice Adams. Ella solo espera que se resuelva para la próxima ola de registros para vacunas en personas más jóvenes e incluso más adaptadas al Internet.
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