De acuerdo con tres fuentes familiarizadas con el Servicio Secreto, más de 130 agentes de dicha agencia contrajeron COVID-19 o están en cuarentena después de tener un contacto cercano con compañeros de trabajo infectados, reseñó The Washington Post.
Al menos 10% de los agentes de seguridad central del Servicio Secreto están inactivos de momento. Los oficiales tienen la tarea de proteger la Casa Blanca y al presidente de Estados Unidos durante sus viajes, los cuales aumentaron en las últimas semanas de campaña electoral.
Se considera que los viajes del presidente para asistir a mítines de campaña, en los que muchos asistentes no usaron mascarillas, son un factor clave de los contagios. Las fuentes consultadas hablaron bajo condición de anonimato para confirmar la situación.
Entre los infectados se encuentran el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows; y los asesores políticos externos Corey Lewandowski y David Bossie.
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Paralelo a los contagios en la agencia, se observa un aumento de casos en todo Estados Unidos: solo el jueves se informó de 152 mil nuevos pacientes con COVID-19. Asimismo, hay aliados de la campaña de Trump y funcionarios de la Casa Blanca enfermos.
Al menos ocho miembros del personal del Comité Nacional Republicano, incluido el Jefe de Gabinete Richard Walters, tienen el virus. Algunos de los infectados se encuentran en oficinas de campo en todo el país, incluida Pensilvania.
Con información de The Washington Post.
