El pasado 1 de octubre, Jovita Carranza, directora de la Administración de Pequeñas Empresas de Estados Unidos (SBA por sus siglas en inglés) y defensora de casi 32 millones de pequeñas empresas existentes en el país, visitó varias pequeñas empresas en Boston.
Carranza pasó por la cocina colectiva de CommonWealth, en Dorchester y habló con su directora ejecutiva, Jennifer Faigel, sobre los problemas de muchas de las empresas pequeñas que rentan y dependen de esta cocina han tenido que enfrentar debido a la pandemia.
“Nosotros ayudamos a vender los productos de comida que diferentes empresas cocinan aquí, para que logren distribuirlos en supermercados como Whole Foods o en Market Basket, pero también les ayudamos a que puedan vender sus productos a hospitales y a universidades” dijo Faigel.
La cocina del CommonWealth también se encarga de preparar la comida para diferentes hospitales como el Brigham Women’s Hospital, Boston Children’s Hospital y el Mass General Hospital.
“Casi nadie está trabajando por miedo a contraer COVID-19, y esto ha sido devastador para nosotros como organización sin ánimo de lucro, es decir que no trabajamos para obtener ganancias financieras personales o propias. Aparte no solo nosotros hemos sido afectados, otras partes de la industria de la comida como restaurantes o servicios de catering también han estado batallando” dijo la directora ejecutiva.
Carranza también habló sobre el impacto que ha tenido el programa de protección de cheques de pago (conocido en inglés como PPP) y el programa de préstamos por desastre de lesiones económicas también conocido como EIDL sobre la recuperación económica de las empresas pequeñas.
Sólo en Boston hay más de 111,000 negocios que usaron la ayuda del programa PPP, y los fondos que se recibieron superaron los 14 mil millones de dólares, comentó Carranza, quien más tarde visitó también el restaurante Jamaica Mi Hungry en Jamaica Plain y el local Café Juice Up localizado en Mattapan.
La directora ejecutiva de la SBA dijo que en Massachusetts hay un total de 700 empresas pequeñas que representan un millón de empleos, que no solo son importantes para el mercado y la economía del estado sino que también tienen un peso grande en las comunidades en las que la mayoría de sus trabajadores son esenciales.
De acuerdo con Carranza, antes de la pandemia el número de dueños de empresas pequeñas era conformado por una alta cantidad de mujeres latinas, y este número había crecido de una manera notoria.
“Por eso, siendo hija de padres inmigrantes, quiero apoyar a mi comunidad sobretodo como mujer, y cómo latina, además de que es importante para mí estar aquí para poder aprender qué otras cosas necesitan las pequeñas empresas para recuperarse”.
“Nosotros apoyamos a la educación, las relaciones con los bancos para facilitar préstamos para estos negocios y trabajamos con el gobernador y su corporación de desarrollo económico, en fin, tenemos muchos más servicios y productos que ofrecemos totalmente gratuitos”.
Para más información sobre la ayuda que tu pequeña empresa puede recibir visita: SBA.gov., disponible en español y en inglés.