Este año, la celebración del evento deportivo más emblemático de New England, el Maratón de Boston, estará altamente resguardado, y los oficiales de seguridad han dicho públicamente que están preparados para manejar una amplia variedad de amenazas.
Recordemos que hace 5 años un acontecimiento marcó la vida de los bostonianos cuando dos bombas explotaron cerca de la línea de meta el 15 de abril de 2013. Los atentados de Boylston Street mataron a tres personas e hirieron a más de 260.
Oficiales policiales federales, estatales y locales ofrecieron una rueda de prensa este martes, donde dijeron que han hecho ajustes en su plan de seguridad tomando en cuenta el uso de camiones por parte de terroristas en Francia, y francotiradores que disparan desde un hotel.
No hay que alarmarse: los oficiales fueron claros en que no hay información que sugiera que exista ninguna amenaza para los corredores o las decenas de miles de espectadores que se reúnen cada año alrededor para animar a los participantes y se proyecta que el maratón sea lo que siempre es: un evento deportivo y familiar.
En el 2018, la carrera cumple su aniversario 122 y contará con 30.000 participantes.
Los agentes de la policía utilizarán tres drones para monitorear la zona e instalarán una gran cantidad de cámaras de seguridad a lo largo de la ruta. Además, se establecerá un centro de comando unificado.
Estos son los objetos que no estarán permitidos:
■ Mochilas
■ Hieleras con o sin ruedas.
■ Botellas de más de 1 litro de capacidad.
■ Drones
■ Botellas de vidrio de cualquier tamaño.
Lleve sus artículos personales en una bolsa de plástico transparente.
Kurt Schwartz, director de la Agencia de Manejo de Emergencias de Massachusetts, dijo que hasta 8.000 policías uniformados estatales y locales junto con Guardias Nacionales uniformados se desplegarán de manera altamente visible a lo largo de las 26,2 millas. Instó a cualquier persona que descubra algo que parezca fuera de lo común a notificar al funcionario de seguridad pública más cercano de inmediato.