Más de 200 personas se congregaron en el State Hause el pasado jueves 23 de abril para protestar contra una enmienda de ley que evitaría que inmigrantes sin un número de seguro social tengan acceso a vivienda asequible. Entre los grupos vulnerables que podrían ser afectados están inmigrantes víctimas de violencia doméstica y refugiados.
Inmigrantes, amigos de los inmigrantes, líderes comunitarios y representantes de las Organizaciones como MIRA (Massachusetts Immigrant and Refugee Advocacy Coalition), REACH Beyond Domestic Violence, The Chelsea Collaborative y otras organizaciones protestaron contra la enmienda conocida como #575 (Sobre asegurar vivienda pública, promovida por el representante O’Connell).
«Estamos hablando de las víctimas de violación y estrangulamiento», dijo Gladys Ortiz, coordinadora de REACH Beyond Domestic Violence. «La enmienda 575 es un arma que le estamos dando a quienes abusan de estas víctimas para destruirlas”.
Muchos de los inmigrantes que necesitan un techo son aquellos que son víctimas de violencia doméstica y aún no han recibido sus documentos migratorios. Además otros inmigrantes que necesitan un techo son las familias con hijos que son ciudadanos estadounidenses y los que han huido de persecución y torturas en sus países de origen y están en proceso de solicitud de asilo. En algunos casos, estas víctimas necesitan vivienda pública como un medio de escapar de sus agresores, mientras que solicitan visas de inmigración.
«Muchos inmigrantes supervivientes tienen tan pocas opciones que prefieren permanecer en relaciones abusivas», explica Michaela Moser, especialista en consultoría legal en HarborCOV. «El acceso a una vivienda segura y asequible cuando estás en una situación vulnerable realmente te puede salvar la vida».
«Los abusadores les dicen a sus víctimas que no pueden escapar porque nadie se preocupa por ellos», continuó. «Si una enmienda como esta pasa, estamos afirmando que estas amenazas son ciertas, y que [en Massachusetts] no vamos a proteger a las víctimas de la violencia doméstica».
La Coalición MIRA y otras organizaciones comunitarias están haciendo un llamado a los legisladores para que rechacen esta propuesta divisiva. De acuerdo con los activistas, esta medida es peligrosa porque está tratando de “meterse” de manera rápida y discreta en nuestra legislación.
