Yo no sabía que existían métodos específicos para criar niños bilingües hasta que tuve a mi primera hija y comencé a indagar. Siempre supe que la criaría bilingüe, es decir, que le hablaría sólo en español y que el inglés lo aprendería en la escuela o cualquier otro lado que no fuera mi casa, pero no tenía idea que mi método tenía un nombre.
Aunque mucha gente cría a sus hijos con dos idiomas sin saber el nombre del método que han escogido, no es mala idea conocer las opciones para así poder decidir cuál es la que mejor funcionará.
A continuación, te explico cuales son los dos métodos más populares, sus ventajas y desventajas y en qué se diferencian.
El primero, y el que más se usa a nivel mundial, se conoce como OPOL por sus siglas en inglés (one parent, one language) y básicamente es cuando cada padre le habla un idioma diferente a su hijo. Es decir, la mamá le habla español y el papá le habla inglés o viceversa. Este método es perfecto para aquellos cuyas parejas no son bilingües, por ejemplo, como es el caso de muchas personas latinas que se casan con estadounidenses.
La ventaja es que tu hijo está expuesto a ambos idiomas desde el principio lo cual significa que termina aprendiéndolos al mismo tiempo. La desventaja suele ser que esto no siempre es cierto porque los niños suelen pasar más tiempo con un padre que con el otro.
El otro método bastante popular se le conoce como mL@H en inglés (minority language at home) y se refiere a la idea de que en tu casa sólo se habla español y el inglés se aprende afuera (como en la escuela, por ejemplo). Este es el método que yo uso y me ha funcionado de maravilla.
La ventaja es que mis hijos están expuestos al español todo el tiempo que están en la casa, ya que mi esposo y yo sólo les hablamos en nuestro idioma natal. La desventaja es que mucha gente se preocupa que al hacer esto, sus hijos no aprenderán inglés hasta que entren a la escuela. Yo sólo puedo hablar de mi propia experiencia, pero tengo que dejar claro que esto no es un problema ya que los niños aprenderán el inglés más rápido que volando fuera de la casa.