El Baby-led Weaning significa «alimentación complementaria autorregulada» o «alimentación complementaria a demanda», una modalidad de alimentación para bebes para incorporar los alimentos sólidos en la dieta del bebé sin pasar por la fase de purés y papillas, y además, dejando que le propio bebé se alimente por sí mismo usando las manos. De esta manera, el pequeño adopta la alimentación complementaria en base a sus necesidades y gustos.
De esta forma, el rol de los padres es poner a su alcance alimentos adecuados a nivel nutricional y variados, para que ellos elijan qué y cuánto comer.
Lo ideal es iniciar la alimentación ofreciendo al bebé alimentos de fácil masticado que formen parte de la dieta de los padres. De esta manera, al comer lo mismo, son menos propensos a tener problemas de aceptación de sabores y de texturas con la comida.
El Baby-led Weaning aprovecha la curiosidad natural de los bebés y su deseo de explorar las cosas, en este caso alimentos, que podrán descubrir con su tacto, olfato y gusto. Esto fomenta la independencia y seguridad en sí mismo.
Los alimentos que sean muy duros, se pueden hervir o sancochar para suavizarlos, y que sea más fácil para el pequeño de manejar, masticar y tragar.
A través de esta modalidad, los bebés pueden aprender a comer mejor y más variado. También permite que ellos se autorregulen, comiendo hasta que se sientan satisfechos.
El hecho de comer se siente como un juego para ellos, en el que los padres le dan la libertad de analizar y reconocer los alimentos.
En Estados Unidos y algunos países de Europa, esta forma de alimentación complementaria cada vez es más habitual en las familias, ya que son muchos los especialistas y pediatras que lo promueven como el mejor método para que los bebés aprendan a comer por sí mismos, así como experimentan el mundo.
Algunos alimentos que se pueden introducir en este método son la pera o la manzana, cortadas en rodajas muy finas o incluso sancochadas, el brócoli, ya que agarran el tallo con su mano y comen el resto, un filete pequeño de carne que pueden chupar, una zanahoria hervida, patata… Deben ser lo suficientemente blandos, que se puedan manipular con la mano y ser aplastados por la lengua contra el paladar.
