Los inmigrantes y trabajadores de origen latino tienen más riesgo de morir a causa de accidentes laborales, según un informe publicado hoy.
El estudio, elaborado por la central sindical AFL-CIO, revela que en 2012 los trabajadores latinos tuvieron una tasa de mortalidad de 3,7 por cada 100.000 trabajadores.
Esta cifra es un 9 por ciento más alta que el total de muertes en el trabajo, que fue de 3,4 por cada 100.000 empleados.
La directora de Seguridad y Salud de AFL-CIO, Peg Seminario, señaló durante su presentación del informe que aunque ha habido mejoras continúas, sigue siendo una tasa alta, y denunció que los latinos realizan «algunas de las tareas más peligrosas, muchos sin la protección adecuada».
En 2012 se registró la muerte de 748 trabajadores latinos a causa de las heridas sufridas en un accidente laboral, una cifra similar a los 749 que fallecieron en 2011, pero por encima de los 707 que se produjeron en 2009.
La profesión en la que más muertes registra entre los latinos es la construcción, con 220 fallecidos el pasado año, seguida por el transporte y almacenamiento, en las que murieron 92 trabajadores latinos; mientras que en la gestión de residuos y en servicios de reparación fallecieron 91.
Las causas más frecuentes fueron los accidentes de tráfico en las labores de transporte, en los que murieron 274 trabajadores latinos, seguidos de las caídas (161) y los accidentes con maquinaria (134).
Entre los trabajadores inmigrantes, las cifras de fallecidos fueron aún superiores, con 824 muertes, diecinueve menos que un año anterior. El 59% fueron latinos; el 18% blancos y el 16% asiáticos.
California, Texas, Florida y Nueva York fueron los estados que registraron mayor cifra de muertes de inmigrantes en accidentes laborales, con 145, 104 y 86 respectivamente.
La construcción resultó ser de nuevo el sector más mortífero que, con 200 muertes, registró un aumento del 24% respecto al año anterior. Los accidentes en el transporte se cobraron la vida del 16% de los inmigrantes fallecidos.
